Me llamo Carol Luján.

Hoy escribo historias para acompañar y cuidar desde otro lugar. Porque sé que hay libros que no se olvidan cuando los cierras. Historias que se quedan contigo cuando todo lo demás se ha ido.

Fui enfermera durante veinticinco años en mi tierra, Gran Canaria. Cuidé cuerpos, almas y emociones. Aprendí a escuchar silencios que nadie se atrevía a decir en voz alta.

Mis novelas miran verdades que acompañan. Porque a veces, lo que más necesitamos no es una solución, sino una historia que nos mire de frente y nos haga decir: “Eso lo sentí yo.”

Y entonces comprendes: que no estás sola, que aunque los contextos cambien, aunque los paisajes sean lejanos o las épocas distintas, todas, en algún momento, hemos sentido lo mismo.